jueves, 12 de junio de 2014

Robots escribientes

A quienes incumplimos reiteradamente el primer mandamiento del bloguista (“Actualizarás tu blog sobre todas las cosas”) nos vendrían bien esos robots-periodistas que, según parece, redactan ya para medios como Forbes o Los Angeles Times, y en pocos minutos, la crónica de deportes, sucesos o catástrofes de ámbito local.

La pega es que nos hurtarían el placer de escribir o, admitásmolo, el aún mayor de haber escrito.

martes, 15 de abril de 2014

¡Descárgate una mente!

Michio Kaku, el reputado catedrático de Física Teórica de la Universidad de Nueva York, augura que en el futuro -o sea, pasado mañana- las conexiones cerebrales podrán ser grabadas en un disco. ¡Enhorabuena, piratas! Se abre un campo vasto, insospechado y estupefaciente para las descargas ilegales en Internet. ¡Cualquiera podrá tener la mente del propio Kaku en el disco duro de su ordenador y sin pagar un euro por ello! 


viernes, 21 de marzo de 2014

Big Bang

El telediario, por una vez, nos da un respiro y en lugar de volver a contarnos el ya clásico cuento del político que puso el cazo y del empresario que lo llenó se hace eco de las ondas gravitacionales del Big Bang, discernibles en la radiación de fondo del universo, de la que se acaban de detectar trazas gracias a un supertelescopio situado en la Antártida. A mí me llega otra radiación de fondo, pero más cercana, que me impide escuchar los detalles del sensacional descubrimiento. Son mis hijos, arrastrando sus juguetes como si fueran un botín de guerra, por el salón de casa. ¡Bendita la entropía que traen a mi vida!

Telescopio BICE2. Foto de Steffen Richter (Universidad de Harvard).

domingo, 9 de marzo de 2014

Cerca, trova.

Giorgio Vasari pintó en 1563 “La batalla de Scannagallo” sobre un fresco anterior, “La batalla de Anghiari”, pintado en 1505 por Leonado da Vinci en un falso muro del Palacio Viejo de Florencia. Vasari, que también pintó sobre una “Trinidad” de Masaccio, aplicó una pared de unos 15 milímetros entre su fresco y el de Leonardo y pintó en un ángulo la frase “Cerca, trova” (Busca, encuentra”). Los náuatles destruían cada 52 años sus cerámicas, sus casas, sus frescos y sus templos. Lo valioso para ellos, cabe conjeturar, era el hacer, más que lo hecho. Vasari, en cambio, no sólo honra al hacedor de “La batalla de Anghiri” conservando la obra de su antecesor sino que alienta a la posteridad a descubrir el fresco de Leonardo bajo el suyo.

                                             Vasari: "Batalla de Scannagallo" (1563)



sábado, 22 de febrero de 2014

Eternidad.

¿Qué es lo imperecedero en una persona? ¿Qué queda de ella cuando nos falta? ¿Nuestro recuerdo de ella? Pero la memoria es frágil y fabuladora. No es un testigo fiable, y sólo con su ayuda no se puede restituir la realidad íntegra de una persona. ¿La idea que nos hicimos de ella en vida? ¿El modo de ser único con que se nos mostró? Pero las ideas, aunque sean claras y distintas, pueden llegar a falsear la realidad no menos que la memoria, y necesitan cerebros que las cobijen. En ausencia de éstos, ¿qué puede quedar de las personas que fueron y ya no son? ¿El amor que les brindamos o el que ellas nos brindaron, quizá? ¿Y qué quedará de ese amor cuando la persona que nos amó ya no esté, o no estemos nosotros, que la amamos? Tal vez lo imperecedero en una persona, como en todo lo existente, no sea sino el instante, que puede ser eterno.

                                                              Jaume Plensa: Sho (2007)

miércoles, 19 de febrero de 2014

No seas un loser.

La página web de una popular radiofórmula está siendo publitada estos días con una cuña radiofónica de una estolidez tan epifánica como irreparable. Noto un ligero temblorcillo en los dedos al teclear el texto:

                        "No eres tu padre. Déjate de documentales. ¡No seas un loser!".

No hace falta tener el ojo visonario de un Benjamin para adivinar en este eslogan comercial el signo de nuestra época. Aunque el buen sentido, como ya advirtió Descartes, es la cosa más común del mundo porque todo el mundo cree andar sobrado de él, cuando se trataba de cubrir las vergüenzas culturales quien más y quien menos creía de buen tono, hasta no hace mucho, citar a algún filósofo o poeta más o menos renombrado o al menos, llegado el momento de ocupar las baldas del aparador del salón, no olvidaba hacerse con una bonita colección de libros de pega encuadernados en semipiel. Ahora ni eso. En nuestros días lo cool -como se dice ahora- es presumir de analfabeto.

                                         Walter Benjamin captando los signos de su época en el Berlín de los años 30.

sábado, 8 de febrero de 2014

Ropa.

Que la ropa nos vuelva opacos a los ojos de los demás puede ser una bendición. Los ojos, la boca, las mejillas o las manos pueden traicionar, y a menudo traicionan, lo que nos pasa por la cabeza y por el corazón. Al menos si vamos vestidos la alegría genesíaca y neumática que puede llegar a producirnos una mujer hermosa queda oculta a los ojos de la interesada. Al menos hasta que ella quiera...

                                                                         Xavier Valls: Nu au canapé, París, 1964